miércoles, 9 de diciembre de 2009
“Base hereditaria del comportamiento en el toro de lidia” por el .Dr. D. Javier Cañón
“Base hereditaria del comportamiento en el toro de lidia” por el .Dr. D. Javier Cañón. Facultad de Veterinaria. Universidad Complutense de Madrid. Gratificante tertulia científica del Catedrático D. Javier Cañón , sobre el estudio genético al toro de lidia.
Con una gran cantidad de datos e información que tenia el ganadero Juan Pedro Domecq, comienzan los trabajos en la facultad de veterinaria, analizando dicha información sobre el ganado de lidia, haber que resultados y datos podían sacar.
Analizar la genética hereditaria, para ganar selección, no quiere decir que los ganaderos que no manejan estos datos no hagan selección en su ganadería.
El comportamiento, esos componentes se pueden utilizar para la selección.
El comportamiento, es un proceso evolutivo.
Hay diferentes etapas del toro de lidia, hasta llegar al actual, que afectan su comportamiento.
El toro del siglo XVII.
No es lo mismo, lo que se exigía al toro en esta época, en los festejos taurinos que actualmente.
Hasta mediados del siglo XVIII, hay animales como los de casta navarra, que son pequeños, muy vivos, con mucha movilidad, distintos al toro aragonés, con tendencia a la querencia y aplomarse. El toro andaluz mas noble pero con menos movilidad y rapidez que el toro navarro.
Hay una gran variabilidad de animales, tal vez debido a que había diferentes espectáculos, había una demanda diferente de animales. No hay una selección determinada, no hay objetivos específicos, ni definidos. No tienen ningún plan, para seleccionar hacia ningún sitio.
Mediados del siglo XVIII, hasta mediados del siglo XIX.
La suerte de varas, empieza a ser fundamental, se trata de defender al caballo del toro. Lo que gustaba en el torero a pie, eran las gallardías, los quiebros. El capote se utilizaba para quitar al toro del picador y la muleta para preparare al toro para la muerte o suerte suprema .No tiene nada que ver como conocemos actualmente la lidia.
Podemos considerar que empieza la selección, utilizando como actualmente se conoce “la tienta”. Empiezan a comprobar el comportamiento de los animales.
En el sur donde existen grandes extensiones de tierra, se hacían a campo abierto, acoso y derribo y en otras zonas se hacían en plazas de tienta .El objetivo, controlar su comportamiento, si era acorde al patrón del ganadero se dejaba como reproductor. No había información genética vía paterna.
No existía el libro de genealogía de la ganadería. La genealogía por línea paterna no se conocía. Machos y hembras están juntos, sin seleccionar. No se hacían lotes determinados para un macho, como actualmente.
Mediados del siglo XIX a mediados del siglo XX.
Hay una tendencia a castigar al animal, mermarle fuerzas en el caballo. El animal como consecuencia, al empezar la selección, tiene más acometividad y mas bravura Hay que someter y doblegar mas al toro, al ser mas bravo. Empieza a tener más importancia el capote y la muleta. Hay también toros mansos, aplomados, teniendo que hacer la suerte de matar, que pionero fue el torero Costillares, a volapié. En esta época el toro, sufre un castigo mayor, las suertes o tercios son más largos.
Empiezan los ganaderos a utilizar el libro genealógico. Se empiezan tentando algunos animales línea materna. Se siguen sin hacer lotes de cubrición concretos, la información línea paterna, se desconocía. Solo tentaban a madres, grave error, ya que una madre puede dejar en cuatro años dos crías, cuando un semental puede dejar simiente cada año en treinta o cuarenta vacas. Siendo por tanto, mayor la transcendencia genética en el macho que en la hembra. Si te equivocas en la selección de una hembra, te equivocas muy poco, pero con un semental es un error mayor, ya que dejas simiente en una treintena de vacas.
De mediados del siglo XX a la actualidad.
En los festejos actuales, la lidia es muy rica en matices y unas de las consecuencias es la limitación en sus orígenes. Siendo actualmente generalizado el encaste Vistahermosa con cruces adicionales como Gallardo, Cabrera, Jijona.
Toro con mayor bravura, debido a la selección del ganadero.
El tercio de banderillas coge relevancia en esta época.
El ganadero tiene distintos momentos, en la vida de un animal, desde que nace hasta que se tienta, empieza a seleccionar. El ganadero tiene que tomar decisiones comprometidas para su ganadería. Si se queda como reproductor.
El ganadero toma datos del comportamiento, cuando el toro se lidia en la plaza. Ya sabe a que familia pertenece, quien es la vaca y quien el semental, del toro que se va a lidiar. Evalúa el comportamiento y recoge información, para saber el valor genético. Datos recogidos en las tientas y en la lidia del toro en la plaza. La tienta es la herramienta principal que utiliza el ganadero actual.
El ganadero tiene dos herramientas, una la selección, elegir dentro de una población lo mejor que uno tiene, consiguiendo el fenotipo. Otra herramienta es el genetista, que tiene una la labor científica, ayudando al ganadero, eligiendo por merito genético, no por comportamiento.
El genetista estudia diferencias genéticas que hay entre poblaciones, y explota la diversidad que hay entre encastes y ganaderías.
Explotar la consanguinidad en una ganadería es un error, desde un punto de vista científico y genético, si algún ganadero le funciona es pura lotería, no es una estrategia de éxito. No mejora la ganadería, generalmente la empeora.
La selección tiene un efecto acumulativo, lo que consigues un año se va acumulando año tras año, si dejas de hacer selección no pierdes, se mantiene lo que tenias acumulado, no se degenera la ganadería. Los progresos genéticos son lentos de percibir, hasta pasados cinco o seis años, no aprecia la mejora genética.
En el toro de lidia, hay un problema de aislamiento reproductivo, problema de desconexión genética, problema de que existen los encastes, cada ganadería es un mundo genético. Tiene sus encantos, pero tiene un inconveniente desde un punto de vista de selección, cuanto mayor sea el censo, mayor puede ser un proceso genético. Poca variabilidad genética hay en un encaste,mayor variabilidad genética hay entre encastes. Como consecuencia problemas de consanguinidad, depresión endogámica, fertilidad, enfermedades, ganado homogéneo.
Los fenotipo, son los caracteres que se van a medir en el toro de lidia para seleccionar un objetivo. Se miden en una escala subjetiva .Cada ganadero tiene actualmente una información muy precisa de cada animal. Con la información de esos caracteres trabajan para conseguir el toro deseado.
En la actualidad Unión de Criadores de Toros de Lidia ha consensuado estos caracteres, para el programa de selección.
Bravura, movilidad, fijeza, fiereza, nobleza, toreabilidad ,acometeabilidad, fuerza, querencia, ritmo etc.
Heredabilidad de selección, la heredabilidad es la proporción de la variación fenotípica en una población. Cuanto mayor sea la población mejor será la selección. Si en una ganadería tienes toros bravos o mansos sus hijos tendrán el mismo comportamiento.
Pensaba que las hereabilidades que íbamos a encontrar en el toro de lidia serian muy bajas, la de ganado vacuno esta entre 0.25 – 0.30, algunos caracteres en el del toro de lidia, estaba en parámetros mas altos, como bravura, toreabilidad.
Cuando seleccionas mas uno de los caracteres, arrastran a otros, a unos parámetros diferentes, una correlación genética. Por ejemplo si yo aumento la bravura, mas toreabilidad y menor querencia. Es decir los genes que influyen en la bravura son muy parecidos a los de la toreabilidad y la querencia.
Si el ganadero fija fiereza consigue indirectamente menor ritmo y nobleza.
Si el ganadero fija toreabilidad, consigue un toro con nobleza y mete la cara.
Si el ganadero esta haciendo toros muy toreables, genéticamente esta haciendo toros con más nobleza y toreabilidad, pero indirectamente esta tirando la fiereza para abajo.
Juan Pedro Domecq debe llevar como unos diez años seleccionando para fiereza, no es mucho, no llega a dos generaciones, dado que su ganadería estaba en parámetros muy bajos de fiereza.
Como técnico, no entiende la clonación de un toro, tan malo es el ganadero, que en 17 años no ha conseguido seleccionar a otro semental, en 17 años da para seleccionar y conseguir otro y mejor semental. Muy costoso la clonación. No tiene justificación, coste beneficio.
Hay un chip que esta a punto de salir al mercado por 200 euros, da el adn y nos da una información de 50000, parámetros. Se podrá utilizar, teniendo los parámetros concretos el animal, podemos saber si es bravo, manso, noble, etc. Sin esperar a que tenga cuatro años para verle en la plaza o utilizarle para semental.
El estudio realizado en 18 ganaderías, con una información de 400 sementales y 5000 madres. Encontrando coeficientes genéticos muy similares en las ganaderías.
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