viernes, 11 de diciembre de 2009
El 'tatarabuelo' de los toros
Difícilmente Enrique Ponce podría haberse enfrentado a un toro con una cornamenta de dos metros y casi 1.000 kilos de peso, pero el torero, sin saberlo, está detrás del hallazgo del antepasado de los miura con los que se pelea en el coso. Y es que fue viendo una corrida del matador cuando el paleontólogo Bienvenido Martínez-Navarro, uno de los mayores expertos de fauna primitiva en este país, se percató de las similitudes morfológicas entre el astado que se debatía con el capote y el cráneo de un búfalo de hace un millón de años que había encontrado en Eritrea.
PALEONTOLOGÍA | Tenía una cornamenta de dos metros
El investigador, del Instituto Catalán de Paleoecología Humana y Evolución Social (IPHES), se topó con los fósiles de este antepasado taurino, bautizado como 'Bos buiaensis', mientras excavaba en el yacimiento de Buia, cerca del Mar Rojo, en 2003. Ocho años antes, paleontólogos italianos hallaron en ese lugar un cráneo humano de hace un millón de años y llamaron a Martínez-Navarro para que les ayudara a analizar la fauna.
El cráneo del animal estaba hecho añicos, más de 100 fragmentos muy deteriorados que pacientemente, con ayuda del restaurador Francesco Landucci, de la Universidad de Florencia, pudo reconstruir en su totalidad. «Se trata de una pieza espectacular que vino a confirmar la hipótesis que ya había lanzado yo dos años antes, cuando llegué a la conclusión de que los toros modernos tienen una estrecha relación con los búfalos de Olduvai [la garganta del Valle del Rift, en Tanzania, que se considera la cuna de la Humanidad]», explica el especialista español.
El 'Bos buiaensis' de Martínez-Navarro sería, como publica en la revista 'Quaternary International', un eslabón entre esos búfalos africanos, que hoy están extinguidos y se conocen como 'Pelovoris', y el 'Bos taurus primigenius', es decir, el toro salvaje de Europa.
Rosa M. Tristán -EL MUNDO
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario