Francisco Galache, Luis Antonio Rodríguez “Taru” y Diego de Paz Tabernero hablaron sobre la actualidad de la fiesta

 

Bodega Carchena celebró el III Cocido-tertulia, tras las precedentes convocatorias, la primera el pasado año con el maestro Andrés Hernando como personaje central, la segunda el pasado mes de enero con el matador de toros David Mora como invitado especial y la tercera, la del pasado jueves con los ganaderos de bravo Francisco Galache, Luis Antonio Rodríguez “Taru” y Diego de Paz Tabernero formando mesa coloquial, en las citadas ocasiones con este informador como presentador-moderador.
Lleno total en el acogedor establecimiento hostelero cuellarano, degustación de un exquisito y bien cumplido cocido, especialidad de la casa y, seguidamente, el coloquio que tuvo como punto central el tema ganadero, el momento actual de la fiesta con debates controvertidos y asumiendo la conveniencia de aportar y mantener el máximo interés por parte de todos y cada uno de los estamentos de la fiesta de toros.
LUIS ANTONIO "TARU". Es un cabal profesional taurino que cumple cometidos de ganadero de bravo y empresario y que pone tal énfasis en sus manifestaciones y criterios, que a veces confunde el entusiasmo con una cierta y reconocida verdad en torno a determinados aspectos, como las obligaciones estatutarias y fiscales que oprimen en exceso a los ganaderos y empresarios. Se discutió sobre la forma de llevar a cabo los encierros y a este respecto “Taru” afirmó que las reses deben ser conducidas de manera técnica con la aportación de los cabestros, animales éstos que tienen un continuo contacto cotidiano con los animales en las dehesas de bravo. “También hay que tener en cuenta la situación que a veces agobia a los ganaderos que no son titulares de las ganaderías denominadas de élite, que tienen vendidos con mucha antelación los toros de saca para plazas de primera y especialmente para toreros que comandan el escalafón. Me parece denigrante el que determinados espadas tengan hecha la temporada meses antes de que comience ésta y con el privilegio de poder elegir ganadería, compañeros de terna y dineros. El valor, la clase torera y el poderío, deben demotrarse en el ruedo ante toros de verdad. He adquirido vacas y sementales de Vega Villar. Muevo en el campo del orden de 1.500 reses bravas”.
FRANCISCO GALACHE. Hijo de Salustiano y sobrino de Francisco, heredero de los hierros familiares y por lo tanto titular de los mismos. La ganadería de Francisco Galache procede de la del Conde de Vistahermosa, línea Barbero de Utrera. En 1930 la adquiere José María Galache. En 1953 uno de los tres lotes que fueron a parar a sus hijos, corresponde a Francisco. Desde 1969 lleva por separados las dos ramas, la de Urcola y Vegas-Villar. “En la finca ganadera de “Hernandinos” tengo las reses de saca, tres corridas de toros, cinco novilladas de utreros y 40 erales. La mayor parte de lo que lidie irá destinado a plazas francesas. Coincido en gran parte con el criterio de “Taru”, sobre todo en el sentido de la presión fiscal y administrativa que sufrimos y padecemos los ganaderos. Se ha bajado el número de toros, se mantiene el de novillos y sobre los costes, es casi imposible soportar un importante número de machos hasta alcanzar los cuatro años. Yo, gracias al impulso que cobré hace años en Francia, mantengo el ganado que considero límite para no irme en picado con pérdidas que te pueden ocasionar un declive económico”.
DIEGO DE PAZ TABERNERO. Fue novillero y es ganadero de bravo, nieto e hijo de ganaderos. “Mi abuelo adquirió reses del encaste Galache que aumentó con otras de Santa Coloma y Coquilla. Lidiamos poco por la situación complicada que atraviesa la cabaña española en general. Dentro de mi particular estatus, mantengo sobre todo la vocación de ganadero y en ese sentido puedo soportar la presión y dedicar mi tiempo a lo que amo y quiero por encima de todo, ser ganadero de bravo. Tengo tres novilladas de utreros, una para Guadalajara y dos medio comprometidas”.
EL COLOQUIO. Largo en el tiempo, corto en la distancia entre ganaderos y aficionados y muy controvertido un coloquio con interesante participación de aficionados. Hubo momentos incluso de tensión, pero a la larga ameno y coherente. La presencia de participantes en los encierros cuellaranos, bien como caballistas o corredores, provocó esos debates en los cuales hubo acuerdo y desacuerdo según el aspecto tratado. La presencia de tantos asistentes al encuentro, puso de manifiesto el interés que subyace en esta clase de convocatorias que se llevan a cabo bajo la denominación de “cocido-tertulia” en el acogedor establecimiento hostelero del que es titular el entusiasta Luis Alberto Quevedo “Varas”.
Visto, comprobado y disfrutado lo celebrado hasta ahora, se proyecta otro próximo cocido-tertulia para el mes de marzo con una figura del toreo a nivel nacional y claro está, la presencia irrenunciable del torero de Cuéllar Javier Herrero.


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