Esto del Santacoloma sin muchos pies, está inventado desde hace muchos años. Es el santacoloma comercial o fácilmente toreable. El que deja ponerse y su sangre noble ibarreña da nobleza por doquier. Pero cuando el santacoloma no es pegajoso, revoltoso pues pierde mucho interés.
Los ganaderos de Santacoloma se empeñan en buscar que el toro no sea pegajoso y que mantenga los pies justos y que no se meta hacia dentro. El resultado es que si el torero o novillero es malo el espectáculo es ni fu ni fa. El santacoloma tiene que tener pies para emocionar, porque nobleza le sobra para cortar orejas, rabos y patas.
A los novillos de Vinhas les faltaron pies.
Al menos no eran de ese tipo de santacolomas que tienen pies para llegar de lejos y son prontos, pero luego no son pegajosos y terminan engañando al respetable como buenos toros de santacoloma cuando son toros a los que se les ha quitado LA MITAD DE SU COMPORTAMIENTO DE SANTACOLOMA.
Novillada correctamente presentada, algunos novillos tenían algún cuerno más largo que otro, pero destaco la presentación del 1º, 2º y 5º. El 3º y 4º a un mes de cuatreños.
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Novilleros:
El colombiano Guillermo Valencia actúo como un vulgar pegapases ventajista. Golletazo al primero, dos tendidas y dos descabellos. (No sabe matar)
Abel Robles que lo lleva o asesoraba Luis de Pauloba no sabe matar y se pega toda la lidia hablando con el novillo, algo insoportable. Al comienzo del festejo, en el primer toro del Colombiano, participo en un quite a la verónica que dejó una aceptable carta de presentación. Después todo fue cuesta abajo. Se dejo vivo el primero, antes durante la faena de muleta pierde la cara al novillo para recoger una banderilla y sufre una fenomenal voltereta y en el segundo estuvo ya en pegapases, aburrió y mato de estocadas caídas. (No sabe matar)
Sebastian Castillo, el maletilla del carnaval de ciudad Rodrigo, puso ganas, poses de torero y tuvo tanto valor como falta de oficio. Su primer novillo fue un inválido con el que más o menos pudo, con su segundo, su falta de oficio acompañado de ganas nos hizo pensar en lo peor. (No sabe matar)
¿Cuándo la ADAC va a traer a novilleros que sepan matar?. Si queremos que la FIEREZA resucite algún día y a los ganaderos no les de miedo gestionarla, hay que ser sumamente exigente con la suerte de matar o suprema.
Solo los novilleros que saben matar bien, no hacen asco a las ganaderías bravas. Matar bien, es importantísimo, no sólo por estética de la faena; sino que junto a la suerte de varas es el fundamento de la Lidia.
Que fácil se cortarían orejas si se matase bien, en corto, citando con la pierna y engañando con la muleta; llenándose de mocos y babas la mano.
Primero: Comercial algo reservón. Le dan muchos capotazos. En la primera vara empuja el caballo hasta las tablas. En la segunda vara va de lejos aunque tardea. Cumple en varas.
Segundo: Comercial en santacoloma: 1ª vara en corto, derriba pero el caballo consigue levantarse. 2ª va de lejos pero termina saliendo suelto de la vara. 3ª vara trasera, sale suelto y se va lejos. 4ª Marca y sale suelto.
Tercero: Invalido. La Presidenta tuvo a bien mantenerlo. En la muleta se cayó poco, sólo doblo las manos un par de veces, pero era un carretón a cámara lenta. Lo pica Gabin Rehabi fatal, incluso pierde la vara.
Cuarto: Blando pero embestía. 1ª vara sale suelto, es en la paletilla. 2ª arreón le tapan la salida sale suelto pero a su vez vuelve a recargar varias veces. 3ª arreón, carioca con un pitón finalmente se queda en el peto y recarga. Muy buen pitón izquierdo.
Quinto: Comercial un poco más revoltoso. 1ª Trasera y en el costillar. 2ª Arreon empuja y el picador se ceba (Jose Maria Exposito) 3ª Caida y trasera la vara.
Sexto: dos varas, cumple. Se va sin torear.
(Continuará mañana con el capítulo 6: Corrida de Moreno Silva)
Olegario “el Ole”
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