Se presentó como el productor salvador de la fiesta, el revolucionario, el que iba a mejorar la situación de Madrid y bla, bla, bla,… Está haciendo todo lo contrario, daña la fiesta porque está dañando la plaza principal: Las Ventas de Madrid. La plaza de toros, si es que así la podemos llamar, se está convirtiendo en una vergüenza donde lo que menos importa es lo que pasa en el ruedo. A nuestro amigo Simón, Nautalia Viajes y al Centro de Asuntos Taurinos (CAT) parece que solo les importa su explotación no taurina, intentando sacar dinero de todos los sitios menos el taurino, convirtiendo el coso en una discoteca o un circo con sus palomitas, perritos calientes y demás… Triste actuación de todas las partes.
Han saltado las alarmas en la calle Alcalá porque el Ayuntamiento de Madrid ha descubierto otra manera de perjudicar a la fiesta en la Capital, el estado degenerativo que sufre la plaza de toros por culpa del CAT actual y antecesores, que se han olvidado de invertir en el mantenimiento de la plaza y no será porque no han recibido dinero de la fiesta estos años; 47,8 millones de euros en los últimos trece años según el medio Expansión, especializado en economía. A Simón Casas y Nautalia Viajes se les ha visto el plumero y en cuanto han oído que no se puede explotar la plaza en espectáculos no taurinos no les ha interesado porque lo taurino es deficitario, según ellos, claro. Vergonzoso, LOS ABONADOS Y AFICIONADOS DE LAS VENTAS NO QUEREMOS QUE LA PLAZA SEA UN NEGOCIO NI UN CENTRO MULTIUSOS, QUEREMOS QUE SEA PLAZA DE TOROS Y SOLO SE DEN TOROS, el CAT debe cambiar de mentalización y no ver a la plaza como un sitio para explotar y hacerse multimillonario. Se puede ganar dinero, porque la plaza con los toros lo da, pero las cosas hay que hacerlas bien y siempre enfocadas en pro de la tauromaquia. Para ello la Comunidad de Madrid debería recapacitar su concurso y de una vez por todas gestionar la plaza de forma directa, no dejarla en manos de empresarios que solo buscan, de cualquier manera, llenar sus arcas sin importarles el prestigio y seriedad de la primera plaza del mundo.
Cuando los aficionados vimos sorprendidos que Simón Casas cogía el mando de la plaza de Madrid nos entraron dudas y miedo, sobre todo en tres aspectos fundamentales de la plaza que influyen en el estado de la fiesta, siendo éstos principalmente:
1) El Toro. Simón Casas es de sobra conocido por no dar importancia al toro en todas las plazas que ha gestionado, nos prometió que el Toro de Madrid no se iba a tocar y no es que se haya tocado, es que se ha desplomado. La bajada de trapío y la pérdida de seriedad es alarmante, en las corridas y en las novilladas. En lo que llevamos de temporada no hemos visto una corrida completa en presentación excepto algún caso muy contado. En muchos festejos han salido animales indecentes que jamás deberían haber pisado el ruedo, aunque fueran de ganaderías con prestigio. Otro tema importante es que Madrid sigue siendo el ejemplo de las demás plazas y se sigue sospechando ante uno de los fraudes más dañinos de la tauromaquia, EL AFEITADO Y/O LA MANIPULACIÓN DE ASTAS. Novilladas y corridas han salido muy, muy sospechosas, y aquí no pasa nada. Bajo el consentimiento de un palco sin autoridad, sin defender al aficionado y sin velar por la transparencia e integridad que debe abanderar este espectáculo.
2) El Público. A Simón como a muchos taurinos les gusta el público facilón y triunfalista, los intenta convencer para que se olviden de la pureza y que apoyen al éxito sin importarles el cómo. Es un gran orador y ha conseguido que hasta el abonado de Madrid y las diferentes asociaciones no alcen la voz ni protesten ante la decadencia que estamos presenciando. La Asociación El Toro de Madrid seguirá reivindicando y protestando ante tanta tropelía y mentiras de este señor que promete mucho y realiza poco. Pretende desviarnos de lo que de verdad estamos presenciando esta temporada haciendo buenas promociones de descuentos. Que no nos engañen, la bajada del IVA debería repercutir en el precio de las entradas, a la baja, y no está siendo el caso.
3) Que Las Ventas dejase de ser plaza de temporada. El miedo a que Madrid dejase de ser plaza de temporada lo llevábamos palpando hace tiempo, también con Taurodelta, a quien Simón Casas está haciendo buena. Inadmisible que los meses de julio y agosto no haya festejos mayores los domingos, incomprensible que desde la “corrida de la cultura”, el 17 de junio, no se haya celebrado una corrida de toros hasta el 15 de agosto; inaceptable que no haya cumplido con el calendario que presentó a principio de temporada, privándonos de un buen número de festejos que había ofrecido.
El público y la afición mantienen la fiesta de los toros pasando por taquilla. Por eso exigimos más transparencia, más seriedad, más integridad y más compromiso. Es una vergüenza que el CAT y PLAZA1 no hayan mostrado públicamente la oferta que hizo la empresa. A muchos aficionados nos gustaría llevar un seguimiento porque tenemos dudas de su cumplimiento, igual que con el pliego. Esto es misión del CAT, pero parece ser que sus miembros están más a gusto en el callejón que trabajando y exigiendo a la empresa. Esperamos que informen públicamente de las obras que se pretenden hacer, que no se toque la razón de ser de Las Ventas y se respete su idiosincrasia, esto es: Plaza de Toros, sin transformarla en “centro multiusos”, que suele preceder al declive definitivo de las plazas de toros que así son bautizadas.
Por estos motivos y por el descontento general que está viviendo el aficionado y abonado de Madrid solicitamos que Simón Casas cambie totalmente su modelo de gestión o renuncie a la Plaza de Las Ventas, que el CAT tome medidas urgentes y recapacite sobre el cumplimento de sus obligaciones para que la plaza tenga gestión directa y no sea administrada por empresarios que están de paso y que pueden dejar una huella imborrable en el camino hacia el fin de los toros en la plaza de Madrid.
Madrid, 10 de Agosto de 2017
Roberto García Yuste
Presidente de la Asociación El Toro de Madrid
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