miércoles, 10 de junio de 2009

"TOREROS FLAMENCOS"

"ENRIQUE EL MELLIZO"
"Ezpeletilla"-Francisco Ezpeleta Machuca,hijo del torero de Sanlucar Francisco Ezpeleta Moreno,tambien torero como su padre,nacio en Cadiz el 13 de abril de 1825, novio de Dolores con quien llegaría a casarse.Era cantaor como su novia y luego se hizo torero. Su hija Ignacia Ortega Ezpeleta, se casó con Enrique, el Mellizo; Es interesante destacar que una hermana de este matador, Rufina Ezpeleta Machuca se casó con otro mito del flamenco gaditano, Francisco Fernández Bohiga, Curro Dulce, que también fue empleado del matadero y en los ruedos actuó de puntillero de importantes matadores y cuya hija, Rufina Fernández Ezpeleta, se casará a su vez con un hijo de Enrique el Gordo.
"ENRIQUE EL MELLIZO". Nombre artístico de Antonio Enrique Jiménez Fernández. Cádiz, 1848-1906. Cantaor. Padre de Antonio El Mellizo, El Morcilla y Carlota. Alternó su dedicación al cante con su oficio de matarife y sus intervenciones como puntillero en las plazas de toros, especialmente a las órdenes del matador Manuel Hermosilla, su amigo íntimo, y con anterioridad actuó como banderillero en las cuadrillas de El Lavi y El Marinero. Fue el descubridor de don Antonio Chacón, al escucharle en una fiesta celebrada en Jerez de la Frontera, en 1886, con motivo del triunfo de Hermosilla en una corrida, recomendándole para cantar con él en la famosa Velada de los Ángeles de Cádiz. Chacón que nunca olvidaría su gentileza, organizó, en 1894, un festival en el Teatro Eslava gaditano, para recaudar fondos con destino a librar del servicio militar a un hijo de El Mellizo, quien con tal ocasión cantó la siguiente siguiriya: Mira la vergüenza / que me has hecho pasar / de andar pidiendo limosna de puerta en puerta / por tu libertad. Siguiriya que al decir de Aurelio de Cádiz a José Blas Vega, la recreó en una de Triana.
Considerado uno de los cantaores más creadores de su tiempo, especialmente por su personalísima y original malagueña, también se le atribuye la creación del cante por tientos, sobre la base de los cantes de El Marruro. Se le ha equiparado a Beethoven y a Chopin en la música clásica, se ha dicho que hubiera podido ser un Manuel de Falla.En realidad fue un intérprete muy completo, cuya trayectoria artística se desarrolló principalmente en las reuniones y fiestas íntimas, aunque esporádicamente actuó en los cafés cantantes gaditanos La Jardinera, El Perejil y La Filipina.Desde que empezó a cantar ,profesional viajero, un trabajador del matadero gaditano, El Mellizo disfrutó en vida de un prestigio general entre toda la afición y los artistas de la Andalucía y la España de su tiempo. Su fama se extendió, en una época sin discos y sin medios de difusión, allí donde se cantase o se hablase de flamenco, sin disentimiento ni discusiones: perdura, los estilos de Enrique El Mellizo, algo violento y tierno, claro y misterioso a un tiempo, distinto y grande, cuya casi imposible combinación hizo posible su genio...



Antonio Jimenez Cantero el chico mellizo hace un cante por malagueñas de su abuelo Enrique el Mellizo.

TOREROS FLAMENCOS

CARACOLES
Cante denominado de cantiñas, de las llamadas Alegrías, Mirabras, o Romeras, donde se pronuncia a modo de estribillo la palabra Caracoles, se hizo también para bailar. Cuentan que el Tío José El Granaino se le asignan estos estilos de Mirabras, Romeras y Caracoles, se sabe que desde muy pequeño vivió por estas tierras de la provincia de Cádiz, siendo torero y cantaor, estos cantes se divulgaron en los cafés cantantes, este cante por Caracoles D. Antonio Chacón fue quien lo transforma y engrandece, diremos que lo hizo para los Madrileños capital aristócrata del cante Flamenco de muy buenos entendidos donde mas cafés cantantes existieron, cante por Caracoles.
El Granaino formó parte de las cuadrillas de Paquiro, El Chiclana y El Lavi, hasta que una grave cornada le retiró de los ruedos, al final de su vida se dedicaría ya exclusivamente al cante, donde fue un gran divulgador de los estilos gaditanos .
Cante cuya copla consiste en una serie de estrofas, con versos de diferentes medidas. Pertenece al grupo de las cantiñas y melódicamente está muy próximo a las alegrías y, en algunos tercios, al mirabrás. Apenas deja lugar a la improvisación, ya que al contrario que con otras cantiñas, en los caracoles la letra cuenta una historia larga, por lo que no se pueden ir entremezclando estrofas según se le vayan ocurriendo al cantaor. Su origen etimológico radica en que probablemente este cante lo creó alguien para pregonar caracoles.
Una letra muy conocida de caracoles es:

Aunque vendo castañas asás
aguantando la nieve y el frio,
con mi moño y mis medias calás
soy la reina para mi marío.
Regordona, que se acaban,
sin moneas se darán,
que a rumbosa no me ganan
los usías del gabán.
¡Caracoles!
Mocita que dice usté
que son mis ojos dos soles
vamos vivienda y ¡olé!

El Granaino, no puede ser otro que José Jiménez, tío José, el creador de cantes como los Caracoles, el Mirabrás o las Romeras, y del que Aurelio Selles siempre afirmó que vivió toda su vida en el barrio de Santa María. Hoy sabemos, —gracias a Escribano Ortiz—, que nació en Chiclana el 1 de Agosto de 1818.
Su aportación más importante fue la de los Caracoles, recientemente llamados por algunos Alegrías de Madrid, quizás por que su letra más conocida, aluda a la calle de Alcalá.
"Como reluce la gran calle de Alcalá cuando suben y bajan los andaluces.
Vámonos, vámonos al café de la Unión donde paran Curro Cuchares El Tato y Juan León".
De esta letra se sabe que la madrileñizó el gran cantaor de Jerez don Antonio Chacón, pero en Cádiz, José Ezpeleta, Pollo Rubio, que fue banderillero de Antonio Fuentes y un gran cantaor, como casi toda su familia, recordaba y cantaba otra más antigua y cargada de gracia gaditana:

"Como reluce Santa Cruz de Múdela cuando suben y bajan los andaluces.
¡Y otro toro y
otro que sea de Veragua
que lo piden
las señoras de sombreros
y paraguas.
Vámonos, vámonos al café de la Unión donde para el Chiclanero Cuchares y Juan León."
Santa Cruz de Múdela, en Despeñaperros, era parada obligada de las diligencias con los toreros que viajaban a Madrid antes de la existencia del ferrocarril. Juan León era ya maduro en 1844, justo cuando eran proverbiales sus juergas en las tabernas madrileñas. El Tato, casado con una hija de Cuchares, es de una generación posterior.
Arie C. Sneeuw estudia las primeras apariciones del flamenco en Madrid y encuentra con el nombre de "música flamenca", —será la primera aparición pública, conocida, de la palabra flamenco—, una velada musical en los salones de Vensano, donde actúa lo más escogido de los flamencos que se hallan en esa época en Madrid. ¿Quiénes eran estos artistas flamencos que actúan ante diputados, gobernadores de provincias, literatos, capitalistas y hombres de ciencia? El diario "La España" de los días 18 y 19 de febrero de 1853, consultado por el autor, nos da los siguientes nombres: Santa María, Villegas, Juan de Dios, Farfán, Luis Alonso y la hija de Juan de Dios, bailaora, que se convierte en la reina de la fiesta.
También en la cuadrilla de Paquiro actuó José Jiménez, el Granaino; tío José para el cante. Se discutía su lugar de nacimiento, que hoy sabemos que fue Chiclana, pero se sabe que creció y vivió en el barrio de Santa María y que pronto se unió a la cuadrilla de Paquiro, donde fue compañero de el Ratón y de Juan de Dios.
También formó parte de la de José Redondo, el Chiclanero, y en ambas se distinguió por su habilidad con las banderillas y sobre todo como cantaor en las fiestas que celebraban los éxitos de las corridas. Se le tiene por creador de varios palos, entre ellos el Mirabrás y los Caracoles.
Precisamente por Caracoles creó una letra cuando fue sustituido por el Cuco en la cuadrilla del Chiclanero, que ha llegado a nuestros días, rescatada por Aurelio Selles:
"Nicolasillo y capa
son dos sujetos
que vestidos de estudiantes
causan respeto
pero les falta
a el Cuco un clarinete
y a Colas una flauta.
Vámonos, vámonos al café de la Unión donde están el Chiclanero, Cuchares y Juan León."

Parte de la documentación de este articulo es de” Toreros gaditanos en la génesis del flamenco” de Guillermo Boto Arnau.
Cante por Caracoles: Roció Márquez ganadora de la Lámpara Minera 2008.