Julio Pedro Saavedra, dos orejas y dos orejas y rabo.
Juan Ortiz, palmas y dos orejas.
Con una entrada pobre, en una tarde lluviosa.
Los cuatro ejemplares del El Serrano inválidos y justos de fuerza. Ganado con claros síntomas de haber estado un largo periodo estabulado, grandes pezuñas y muy débiles. Justos de presentación y de cuerna. Ligero encuentro con el del castoreño, de tirita y mercromina. Festejo de pueblo con público fácil y festivalero.
Los dos toreros salieron en hombros del coso segoviano.
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