Céret, 15 de Julio de 2007. Luis Francisco Esplá sufre cuatro cornadas, entre ellas una en el tórax, otra cosida a la cara. Muescas para toda la vida. Padilla estaba allí, convidado de piedra. Seguro que ayer alguno de sus flashbacks reverberó esa tarde. El único afeitado en sus corridas,como suele, patillas cabeza de hacha, la misma que ensartó lo genuino de la muerte en lo verdadero de eso por los que algunos son capaces de denigrar su intrínseca condición humana para ponerla a la betunera altura de la vida de un animal. La Tauromaquia, como la muerte -último eslabón de la vida, no un aparte- eternos a su pesar. Discriminación positiva que se hace cuando uno enarbola lo extraordinario como su modus vivendi: lidiar ganaderías que más de gediez no han oído mentar en su artística vida. Comunero levantado en armas, Jon Yosu Padilla:gaditano de Zabálburu, Rh positivo de Jerez. Burlesco, que no bufo, sirva esta parada y fonda para no olvidarnos de que tu conciencia torera puede morar tranquila. Y nosotros contigo.
#fuerzapadilla
Foto: Juan Pelegrín
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