PONERSE EN LA PIEL DEL TORERO

JAVIER FERNÁNDEZ | TUDELA DE DUERO. 

Un tentadero muestra los progresos de los alumnos más destacados en esta iniciativa

Finaliza en Tudela de Duero el primer taller práctico de tauromaquia para aficionados

 

Una vez tomado el contacto y aprendido el manejo de los trastos de torear en las últimas semanas a través de clases de verónicas y quites, toreo en redondo y al natural, así como adornos, remates y estoque, los participantes en el primer taller práctico de tauromaquia para aficionados pusieron el colofón a la experiencia con una iniciativa práctica, tentadero en el que los alumnos más destacados tuvieron la oportunidad de mostrar su destreza ante las becerras del ganadero Luis Antonio Rodríguez 'Taru' en la finca Toros de Tierz, propiedad de César Mata, en el término de Tudela de Duero. El ejercicio final, que incluyó visita guiada al Museo Taurino de Valladolid y comida en el restaurante El Viejo Portazgo, ha sido el epílogo de una iniciativa desarrollada las jornadas anteriores en La Cistérniga gracias a la implicación del Ayuntamiento de la localidad, la organización del Centro de Tradiciones del Toro de Castilla y León y, sobre todo, la coordinación de Felipe Romero Salvachúa y la aportación de profesionales del mundo taurino y aficionados prácticos que no han dudado en ofrecer su sabiduría y técnica en este campo a la quincena de asistentes. Los aprendices, en el último lance del taller, demostraron sus progresos y su capacidad ante las reses, además de sentirse toreros por un día con la ayuda en la lidia, los ánimos y consejos de profesionales del mundo taurino como Jorge Manrique y Mario Campillo, así como los novilleros Ricardo Maldonado y César Sánchez y los aficionados prácticos Juan José García y Juan Mateos, entre otros. Y es que además del aprendizaje de los aficionados, una de las ideas principales del taller era el acercamiento entre alumnos y profesionales, según Felipe Romero, se trata de «despertar la idea de que la proximidad entre aficionados, toreros y ganaderos es un tema imprescindible para ampliar el número de aficionados de forma sólida lo que supone la base necesaria para que pueda mantenerse vigente la fiesta», comenta. La iniciativa ha resultado todo un éxito en lo organizativo y en lo artístico por el alto número de alumnos que han adquirido un nivel excelente como demostraron ante las reses en la clase final donde uno a uno se pusieron delante de las becerras para llevar a cabo de la mejor forma posible todo lo aprendido hasta el momento y poder valorar lo que siente un torero en la plaza. Porque lo que el taller de tauromaquia pretende es «difundir la figura del aficionado práctico como una categoría más entre los seguidores de la fiesta, y el toreo aficionado como una actividad posible y cercana a cualquier persona que sienta esta inquietud», según destaca Romero. Consolidar la idea La intención de la organización, debido al entusiasmo de los participantes y las numerosas peticiones de los aficionados, es dar continuidad a la idea y consolidar este taller con la realización de nuevas ediciones el próximo año. «Queremos mostrar en estas épocas no demasiado favorables para la fiesta que la afición a los toros sigue teniendo una dimensión socialmente horizontal, tanto por edades como por profesiones y que los aficionados estamos activos y orgullosos de nuestra pasión», destaca Felipe Romero. «Es muy importante extender este modelo de taller y colaborar en que se hayan puesto en marcha otros experiencias similares que ya se están organizando en Extremadura y muy posiblemente en Barcelona», añade. Los aficionados de Valladolid que han sido pioneros en esta actividad han podido realizar y ver cumplido uno de sus sueños, como es pasar de espectadores a protagonistas de la llamada Fiesta Nacional, además de disfrutar de su afición de una forma intensa, sincera y diferente teniendo la oportunidad de acercarse al toreo desde una perspectiva práctica que les ha permitido también conocer en primera persona los fundamentos básicos de la técnica de torear de la mano de los mejores profesionales.