La Comunidad autoriza en la primera mitad de año 272 espectáculos taurinos

La Comunidad de Madrid autorizó en la primera mitad del año un total de 272 espectáculos taurinos en 38 municipios de la región, 283 en el mismo periodo de 2010, lo que representa un 4 por ciento más, según datos facilitados por la Consejería de Presidencia y Justicia.

Hasta el momento se han autorizado 6 becerradas, 12 novilladas sin picar, 50 corridas de toros, siete rejones, 9 festivales taurinos, nueve concurso de recortadores, 71 encierros y 83 sueltas de reses. No obstante, habrá que esperar al verano y principalmente a los meses de agosto y septiembre, que es cuando se celebran la gran parte de los festejos populares y el 70 por ciento de los espectáculos taurinos, para conocer si se mantiene el descenso.

La Consejería de Presidencia y Justicia ostenta, a través de la Dirección General de Seguridad e Interior, la competencia para autorizar los diferentes festejos taurinos que se celebran en la región. A la hora de autorizarlos, se atiende a tres principios básicos: la seguridad de las personas, el respeto a las tradiciones locales y la protección de los animales, de modo que queda prohibido en todos los espectáculos taurinos populares herir, pinchar, golpear, sujetar, atar o tratar de cualquier modo cruel a las reses.

En cuanto a las medidas de seguridad existentes para los espectáculos taurinos populares, desde el Área de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas recuerdan que todos aquellos que quieran participar en los mismos deberán tener al menos 16 años, quedando prohibida la participación de aquellas personas que presenten síntomas de intoxicación etílica o de cualquier tipo de sustancia estupefaciente, sin se pueda portar vasos, botellas o cualquier otro instrumento que pueda causar malos tratos a la res, ni se permitirá participar a personas que porten cualquier instrumento que pueda dificultar las carreras de los encierros.

Además, los espectadores de los encierros deberán instalarse de tal manera que no impidan la utilización del vallado del recorrido, como punto de socorro, por los participantes en el mismo. En este sentido la Comisión organizadora del encierro dará las instrucciones para que el Delegado Gubernativo y, en su caso, la Policía Local vigile la ubicación del público, y garanticen la correcta utilización del vallado para los fines para los que está previsto, según ha indicado el Gobierno regional.

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