lunes, 7 de noviembre de 2011
Manolo Sánchez recogió el trofeo al mejor encierro, de Esteban Isidro
Las reses de esta ganadería salmantina, que el matador vallisoletano representa en la zona, fueron las ganadoras de este premio que otorga cada año Encierros de Cuéllar.
El matador vallisoletano Manolo Sánchez fue el encargado de recoger el trofeo al Mejor Encierro otorgado a la ganadería salmantina de Esteban Isidro por la Asociación Encierros de Cuéllar. Sánchez es el representante de la ganadería Martínez Flamarique, propiedad de la Casa Chopera, en la zona y sorprendió a los asistentes, que llenaban la sala del Palacio de Pedro I, con la sinceridad en sus palabras, especialmente en lo concerniente a su retirada de los ruedos.
El jurado de este trofeo, que entrega anualmente la Asociación, concedió siete de sus diez votos a esta ganadería que participaba por primera vez en los festejos de la villa y que protagonizó el encierro del lunes 29 de agosto siendo por la tarde las reses lidiadas por los rejoneadores Pablo Hermoso de Mendoza, Leonardo Hernández y Manuel Manzanares.
El presidente de la asociación, Carlos Fraile, abrió el acto que el el crítico taurino, Emilio Ruano, moderó.
Tras la proyección del video del encierro con las reses de Esteban Isidro, Sánchez se mostró sorprendido señalando que nunca había visto el encierro completo sino tan solo en algún punto de su recorrido. Así apuntó que las reses tienen que llegar preparadas para afrontarlo y señaló que no considera que afecte mucho a la lidia posterior. Subrayó el éxito de la autogestión asumida por el Ayuntamiento este año y destacó que Cuéllar debe cuidar sobre todo sus encierros por ser los más antiguos de España “es una tradición que hay que seguir y mantener”, afirmó. Sobre las reses de Esteban Isidro que participaron en el encierro Sánchez destacó su tamaño lo que en principio asustó a los rejoneadores e indicó que tres de ellas estaban preparadas para una corrida en Madrid.
Sobre su reciente retirada de los ruedos, Sánchez señaló que llevaba 19 años en activo y necesitaba cambiar de rumbo. Toreaba unas 15 corridas al año y señaló que no es fácil mantenerse ahí. Afirmó que se encontraba ahora en un buen momento profesionalmente y que ahora hay una nueva generación de toreros que se arriman más y lo arriesgan todo. “Ahora hay una competición total entre toreros”, afirmó.
eladelantado.com.
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