La huida de los seis novillos por el campo obligó a soltar a otros seis para que realizaran el recorrido urbano
Cuéllar
vivió ayer uno de los encierros más atípico y complicado, a pesar de
que no se registraron heridos de gravedad, de los últimos años. Los
novillos de Peñajara de Badajoz protagonizaron una huida colectiva en el
recorrido por el campo, provocando momentos de tensión, al cornear y
matar dos de los astados a uno de los caballos que acompañan a la manada
en el campo. Los caballistas intentaron unir al grupo, pero las reses
volvieron a separarse, lo que obligó a anestesiarlas en el campo. Al
cierre de esta edición, aún andaba extraviado uno de los novillos, según
explicó a esta Redacción el alcalde, Jesús García.
Ante la imposibilidad de conducir los novillos hasta las calles de
Cuéllar,
los responsables municipales acordaron sacar al recorrido urbano otros
seis astados de la ganadería Escudero de Cortos, que iban a protagonizar
el encierro del martes y la novillada con picadores de la tarde de ese
mismo día. Esta situación generó las protestas y quejas de los
espectadores que se situaban en la zona del Embudo, al decidir soltar
las reses unos cien metros más adelante del inicio habitual del tramo
del encierro urbano. Los nuevos novillos realizaron un encierro sin
muchos incidentes, con pocas carreras entre los mozos, entrando uno a
uno en el coso taurino.
La enfermería de la plaza cuellarana atendió a dos personas con
contusiones varias, una tercera con una luxación de hombro, y un cuarto
corredor al que le realizaron varios puntos por una brecha en la frente.
Enfados y decepcionados se encontraban ayer los responsables de las
asociaciones taurinas cuellaranas, después del primer encierro de las
fiestas de
Cuéllar, que congrega a miles de personas en las calles de la villa.
El presidente de la peña El Encierro, Álvaro Herguedas, calificó de “lamentable” la imagen dada ayer por
Cuéllar,
en el primero de los encierros, considerados como los más antiguos de
España. Herguedas no quiso hacer más declaraciones, aunque anunció que
al término de los festejos la asociación analizará todo el programa
taurino y realizará un balance.
Por su parte, el presidente de la asociación
Encierros de
Cuéllar,
Carlos Fraile, afirmaba en el informe diario que el colectivo efectúa
al término de cada encierro, que “hoy no se puede valorar el resultado
del encierro porque entendemos que no ha existido”. “La situación que se
ha creado es perfectamente previsible en nuestros encierros, es para
estas situaciones en las que se debe aplicar el protocolo que tantas
veces hemos demandado y que la corporación municipal sigue empeñada en
no considerar necesario”, apuntó.
Ambas colectivos taurinos cuellaranos han rechazado las declaraciones realizadas por el concejal de Festejos de
Cuéllar,
Juan Pablo de Benito, “en las que manifiesta, entre otras cosas, que el
ganado previsto para esta mañana (por ayer) taparía muchas bocas”. Y es
que la polémica viene de hace meses, desde cuando empezó a prepararse
el programa de las Fiestas de
Cuéllar. Los cambios propuestos por el
Ayuntamiento
de suprimir la corrida del domingo y adelantar a ese día el certamen de
cortes, ya generó el rechazo de muchos vecinos. Se sucedieron los
comunicados de los colectivos exponiendo su posición y su unión dio
lugar a la creación de un logotipo para la defensa de la pureza del
encierro. Con ese logotipo se pretende defender esa pureza, así como la
tradición, cultura y la marca de calidad que se ha ido creando y
asentando con el paso de los años en
Cuéllar.
eladelantado.com